Cuando visitas una web, lo que ves es solo la fachada. Pero detrás de cada botón, imagen o párrafo, hay un conjunto de instrucciones que hacen que todo funcione. Ese conjunto se llama código fuente de una web. Verlo no requiere conocimientos avanzados. De hecho, es más fácil de lo que parece. Y si te interesa el SEO, el desarrollo web o simplemente tienes curiosidad, entender este código puede darte muchas pistas sobre cómo está hecha una página.
Tabla de Contenidos

Qué es el código fuente
El código fuente es el conjunto de instrucciones que el navegador utiliza para construir una página web. No es lo que ves como usuario, sino lo que está “debajo”, organizando cada parte del contenido y definiendo cómo se debe mostrar.
La base es el HTML, que estructura la página: indica dónde va cada título, párrafo, imagen o enlace. Es el esqueleto que da forma a la información.
Pero una web no se compone solo de estructura. El CSS se encarga del diseño visual: colores, márgenes, tipografías, disposición de los elementos. Y el JavaScript aporta dinamismo, como desplegables, efectos o acciones al hacer clic.
Entender el código fuente es como revisar los planos técnicos de un edificio. No ves la pintura ni los muebles, pero sí cómo están organizadas las estancias y por dónde pasa la instalación eléctrica. Es la vista interna de cómo se construye una web desde cero.
Para qué sirve mirar el código fuente
Uno de los motivos más comunes es el SEO. Google no “ve” las páginas como nosotros. No se fija en colores ni en diseños bonitos. Lee el código fuente. Si entiendes cómo lo hace, puedes optimizar tu web para que el buscador entienda mejor tu contenido.
Además, mirar el código sirve para:
- Ver si hay errores o elementos mal implementados
- Comprobar si se están cargando scripts o recursos externos
- Analizar cómo están estructuradas las etiquetas de título
- Detectar el uso de herramientas como Google Analytics, Pixel de Facebook o scripts de terceros
También es útil si trabajas con WordPress, PrestaShop o cualquier CMS. Te ayuda a entender qué parte del contenido está generado por el tema, por los plugins o por el propio editor.
🔍 Cómo Ver el Código Fuente por Navegador
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Clic derecho → «Ver código fuente»
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Ctrl + U (Win) / Cmd + U (Mac)
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Menú → Más herramientas → Ver código fuente
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Clic derecho → «Ver código fuente»
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Ctrl + U (Win) / Cmd + U (Mac)
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Menú → Más herramientas → Ver código fuente
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Clic derecho → «Ver código fuente»
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Ctrl + U (Win) / Cmd + U (Mac)
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Menú → Más herramientas → Ver código fuente
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Activar menú Desarrollo en Preferencias
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Clic derecho → «Mostrar código fuente»
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Cmd + Opción + U
Cómo ver el código fuente desde tu navegador
El código fuente se puede consultar fácilmente desde cualquier navegador web de escritorio. Pero como cada uno tiene sus propios menús y atajos, vamos a ver cómo hacerlo según el navegador que uses. Así no pierdes tiempo buscando opciones que no existen en tu caso.
Google Chrome
En Chrome tienes varias formas de acceder al código fuente.
- Clic derecho en la página y selecciona “Ver código fuente de la página”.
- También puedes pulsar Ctrl + U en Windows o Cmd + U en Mac.
- Si prefieres usar el menú, ve a los tres puntos arriba a la derecha > “Más herramientas” > “Ver código fuente”.
Chrome también tiene herramientas para desarrolladores más completas, que veremos más abajo, pero para una vista rápida del HTML, esto es suficiente.

Mozilla Firefox
Firefox funciona de forma muy parecida.
- Haz clic derecho en cualquier parte de la página y elige “Ver código fuente de la página”.
- O usa el atajo Ctrl + U en Windows o Cmd + U en Mac.
- Desde el menú: haz clic en las tres líneas arriba a la derecha > “Más herramientas” > “Ver código fuente”.
Además, Firefox te permite resaltar partes concretas y ver su código directamente si usas las herramientas de desarrollador.

Microsoft Edge
Edge está basado en Chromium, así que los pasos son casi idénticos a los de Chrome.
- Clic derecho > “Ver código fuente de la página”.
- Atajo rápido: Ctrl + U (Windows) o Cmd + U (Mac).
- Menú superior: haz clic en los tres puntos > “Más herramientas” > “Ver código fuente”.
También puedes combinarlo con herramientas de desarrollo si necesitas una inspección más detallada.

Safari (Mac)
Safari es un poco distinto, ya que por defecto no muestra el menú de desarrollo.
- Ve a Safari > Preferencias > Avanzado y activa la casilla “Mostrar el menú Desarrollo”.
- Luego haz clic derecho en la página y elige “Mostrar código fuente de la página”.
- También puedes usar el atajo Cmd + Opción + U.
Una vez activo el menú, tendrás más opciones para inspeccionar la estructura y analizar cómo se ha renderizado la web.

Cómo ver el código fuente desde el móvil
En dispositivos móviles el proceso es más limitado, pero hay algunos trucos que pueden servirte.
En Android, abre el navegador (Chrome o similar) y en la barra de direcciones escribe view-source:
seguido de la URL que quieres inspeccionar. Por ejemplo:view-source:https://www.ejemplo.com
En algunos casos es necesario borrar el https://
original antes de poner view-source:
. No funciona con todas las webs, pero sí con muchas.
En iPhone, los navegadores no permiten ver el código fuente de forma directa. Existen apps y extensiones de terceros que puedes instalar si necesitas esa función.
Herramientas para desarrolladores (DevTools)
Más allá de ver el código fuente básico, todos los navegadores modernos incluyen un panel llamado Herramientas para desarrolladores, o DevTools. Esta herramienta te permite ir un paso más allá.
Mientras que el código fuente te muestra el HTML tal como llega desde el servidor, las DevTools te enseñan cómo está la página después de que el navegador ha procesado ese código. Es decir, incluye todos los cambios que se hacen con JavaScript, como menús que se abren, textos que aparecen más tarde o contenido que se carga dinámicamente.
También puedes inspeccionar elementos concretos, ver el CSS que tienen aplicado, probar cambios visuales, analizar tiempos de carga, revisar errores de consola y más.
Para abrirlas:
- Windows/Linux: pulsa F12 o Ctrl + Shift + I
- Mac: pulsa Cmd + Opción + I
Es una herramienta más avanzada, pero muy útil si quieres entender cómo funciona una web en tiempo real o comprobar por qué algo no se muestra correctamente.
Qué elementos se ven en en código fuente de una web
Aunque el código fuente puede parecer caótico al principio, hay zonas clave que puedes identificar con facilidad. Algunas de las más importantes si piensas en SEO o rendimiento web son:
- Etiqueta
<title>
:
Define el título principal de la página. Es lo primero que ve Google y aparece en las pestañas del navegador. - Encabezados (
<h1>
,<h2>
, etc.):
Marcan la jerarquía del contenido. Es importante que el<h1>
sea único y describa claramente el tema de la página. - Meta descripción:
Se encuentra en una etiqueta<meta name="description">
y resume el contenido. Aunque no afecta directamente al posicionamiento, sí mejora el CTR si está bien redactada. - Texto alternativo (
alt
) en imágenes:
Ayuda a la accesibilidad y también a que las imágenes aparezcan en Google Imágenes. - URL canónica:
Indica cuál es la versión principal de una página cuando hay contenido duplicado. Aparece en una etiqueta<link rel="canonical">
. - Carga de scripts:
Puedes ver si hay JavaScript o CSS externos, desde qué dominios se cargan y si afectan a la velocidad.
Este tipo de detalles no se ven a simple vista, pero están ahí, y pueden marcar la diferencia entre una web que posiciona bien y otra que no.
Qué cosas no puedes ver
No todo está en el código fuente. Hay partes que se generan en el servidor y nunca se envían al navegador. Por ejemplo:
- Consultas a bases de datos
- Lógica del backend (PHP, Node.js, etc.)
- Información sensible o privada
También es común que los archivos JS o CSS estén minimizados, lo que hace que sean más difíciles de leer. En algunos casos se usan técnicas de ofuscación para ocultar detalles técnicos.
Un consejo importante
Ver el código no implica modificarlo. Puedes inspeccionar sin problema y de hecho, desde las herramientas del desarrollador es posible cambiar temporalmente el diseño o los estilos CSS para hacer pruebas rápidas. Por ejemplo, puedes ajustar colores, tamaños o fuentes para ver cómo quedarían en la página.
Pero esos cambios solo los ves tú. No afectan a la web real y desaparecen al recargar. Si quieres aplicar modificaciones permanentes, tienes que hacerlo accediendo a tu CMS o directamente desde tu hosting web.
Tómatelo en serio: un pequeño error en el código puede romper funciones, desconfigurar el diseño o incluso dejar la web inaccesible. Siempre que vayas a tocar algo, haz una copia de seguridad o trabaja en un entorno de pruebas antes.
Conclusión
Entender cómo ver el código fuente de una web no es solo cosa de programadores. Es una habilidad sencilla que puede ayudarte a analizar páginas, mejorar tu posicionamiento en buscadores, detectar errores o simplemente aprender cómo están hechas otras webs.
Tanto si usas Chrome, Firefox, Safari o Edge, todos los navegadores te permiten acceder fácilmente al código. Y si necesitas algo más avanzado, las herramientas de desarrollador te abren un mundo de posibilidades para experimentar y entender el funcionamiento interno de cualquier sitio.
Ya sea por curiosidad, por trabajo o por mejorar tu propia página, abrir el código fuente es como mirar bajo el capó de un coche: siempre hay algo interesante que descubrir. Y ahora que sabes cómo hacerlo, estás un paso más cerca de dominar lo que pasa detrás de cada click.